Intoxicación con ivermectinas Por Dr. Néstor Bonaiuto (Médico Veterinario)



La ivermectina es un fármaco antiparasitario perteneciente a la familia de compuestos de avermectinas. La ivermectina es una mezcla de 80% o más de un análogo de avermectina B1a (AB1a) y un 20% o menos de un análogo de avermectina B1b.
Estos compuestos son 2 de 4 avermectinas producidas por el actinomiceto Streptomyces avermitilis. Aunque son similares en estructura a las lactonas macrocíclicas, las avermectinas no tienen actividad antibacteriana o antifúngica. Tienen un amplio espectro de actividad contra nematodos y artrópodos parásitos de plantas y animales
La ivermectina sintética se usa principalmente como antihelmíntico en animales de grandes y pequeñas especies, también se usa como un preventivo para la dirofilariosis canina (6 μg / kg PO mensuales).
También se utiliza en perros a dosis más altas (50-300 μg / kg PO o SQ) especialmente para ectoparásitos (por ejemplo, demodicosis).
La intoxicación ocurre cuando se administran dosis altas por vía oral, tópica o parenteral. También ocurre con frecuencia en los perros de raza de pastoreo debido a una mutación en el gen de resistencia a múltiples fármacos (MDR-1). Perros jóvenes tienen un mayor riesgo por inmadurez de la barrera hematoencefálica.
Dosis tan bajas como 100 μg / kg en razas susceptibles causarán signos leves en el 30-40% de los perros, cuanto mayor sea la dosis, mayor será el porcentaje de perros afectados y más graves serán los signos clínicos.
En razas no sensibles, se requiere una dosis de> 2000 μg / kg para producir signos de tóxicosis.
La barrera hematoencefálica normalmente impide que la ivermectina entre en el SNC, protegiendo a los mamíferos de la neurotoxicidad. Sin embargo, en perros con la mutación del gen MDR-1, existe una carencia de una proteína transmembrana grande (Glicoproteína P) que actúa como una bomba de transporte de fármacos hacia el cerebro.
La intoxicación puede ocurrir en las siguientes situaciones:
1 - Paciente genéticamente predispuestos
2 - Por sobredosis accidental: .
3 - Por toxicidad acumulada:
4 - Por alteración de la barrera hematoencefálica: Se debe tener cuidado con el uso de ivermectina en perros con traumatismo craneal, encefalitis y tumores cerebrales.
Los signos clínicos no neurológicos incluyen salivación, vómitos, diarrea, bradicardia e hipertermia.
Los signos clínicos neurológicos incluyen ataxia, temblores, desorientación, debilidad, convulsiones, estupor y coma. Algunos perros tienen midriasis, respuesta de la amenaza ausente y ceguera.
La intoxicación por Ivermectina se diagnostica frecuentemente posterior a una posible exposición con la ivermectina y los signos clínicos compatibles.
Exámenes de laboratorio hematológico y bioquímico no suelen mostrar cambios significativos aunque puede mostrarse una hemoconcentración e hipoglicemia en pacientes con tremores y convulsiones prolongadas.
El tratamiento debe ser aconsejado por el profesional ya que es una verdadera emergencia. Incluso debe ser internado para tener un monitoreo mas enérgico
El pronóstico para la recuperación es de reservado a bueno, especialmente si se diagnostica y se trata temprano y agresivamente, la recuperación se presenta por lo general entre los 7 y 10 días, pero en pacientes comatosos puede ser más prolongada, pacientes con signos de toxicidad crónica el pronóstico es de reservado a malo.

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